
En principio menos competencia en la posición de media-punta para Isco o lo que es lo mismo, más minutos para el malagueño. Bale, de todas formas, no había hecho pre-temporada y no pudo jugar de primeras y luego se lesionó de la espalda. Mientras el galés volvía a los terrenos de juego, el malagueño era un fijo once y goleaba, asistía y hacía jugar a su equipo. De ser un fijo y jugarlo todo pasó a ser el primer substituido y cada vez antes, hasta el partido del Camp Nou contra el eterno rival, que Isco ya no jugó ningún minuto debido a la presencia de Sergio Ramos en el medio del campo que vieron reducidas sus posibilidades de jugar su primer clásico.
Si a la vuelta de Bale le sumas la de Xabi Alonso y la elección de un nuevo sistema por Carlo, Bale,Cristiano y Karim en punta y un medio campo con un doble pivote y un mediapunta, Isco se vió obligado a tomar sitio en el banquillo. Jugando algunos minutos en casa contra Sevilla y Real Sociedad y siendo un simple espectador contra el Rayo.
Pero por desgracia para el Madrid y para Sami Khedira, el alemán se lesionó en el último partido con su selección. Estará prácticamente toda la temporada fuera de los terrenos de juego y quizás se pierde el mundial de Brasil, una lástima la verdad. Debido a esta ausencia, Isco volvió a jugar este sábado y volvió a encandilar con su juego. Marcó y dirigió a su equipo como el sabe y confío que lo pueda seguir haciendo siempre y cuando su entrenador cuente con él.
Isco, Isco, es buenissimo, presente y futuro del Madrid y de la Selección Española.
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