Faltó de todo

En este Mundial de Brasil a España no se le ha visto como en otras citas anteriores donde maravilló al mundo con su fútbol de toque y el motivo principal fueron diferentes carencias en el conjunto del grupo. No personificaré estas carencias en ningún jugador en concreto ya que creo que ni es el caso y que es muy fácil criticar desde el sofá de casa sin ser críticas constructivas. Estas carencias las expondremos a continuación.
             Primero de todo faltó hambre de ganar, en parte normal como en cualquier ciclo futbolístico. También faltó gol ya que en estos dos partidos, una Selección que no se caracterizó por ser goleadora pero si resolutiva, solo pudo conseguir anotar un gol en dos partidos y de penalti.

             Faltó físico e intensidad y se nota mucho en el fútbol actual. Este grupo tiene seis años más que en la primera Eurocopa y eso se tiene que notar. Los rebotes acaban siempre en las botas rivales porqué se anticipan en casi todas, con ello se consigue generar ocasiones aprovechando desajustes de posición y se consigue acabar controlando el partido sin obligar a tener la posesión en números. Con lo anterior carencia sale a la luz la defensiva y que deja con siete goles en dos partidos a una campeona del mundo. Mientras a nosotros nos costaba una barbaridad generar ocasiones, a los rivales con dos pases a partir de tres cuartos, conseguían ocasiones con demasiada facilidad.

              Faltaron alternativas en el juego: quizás otro tipo de delantero, algún jugador más de banda para abrir el campo en partidos atascados o intentar aprovechar más jugadas a balón parado.
              Y para acabar una de las que hace muchas veces imprevisible este y muchos deportes, la suerte. Muchas veces competiciones o partidos importantes se analizan para intentar saber como puede ir el partido o como lo puede encarar X equipo para poder llevarse la victoria. Pero muchas de estas palabras se quedan en el olvido debido a un balón al palo que no entra, un penalti fallado, una expulsión a destiempo,... y decantan partidos o competiciones del lado completamente opuesto al pronosticado.